Queseros
desde 1930
El queso es un producto que a millones de españoles les apasiona. Es un alimento que levanta pasiones y forma parte de la comida favorita de muchos de nosotros. Tradicionalmente, se toma en compañía de la familia o amigos y con buen vino, es un placer muy difícil de renunciar.
Ser una fábrica de quesos significa crear algo que hace feliz a las personas. Algo que diariamente y en momentos de celebración, une a familias y amigos. Pero es mucho más que eso, es una cultura, un arte. Quesos Manzer lleva desde 1930 haciendo lo que mejor sabe hacer, un queso en multitud de formatos y curaciones, desde en lonchas hasta 3 kilos, de tipo tierno hasta añejo, adaptándose a los gustos de los amantes de este manjar. El seguimiento de la tradición es uno de los valores más importantes por los que Manzer sigue apostando hoy en día y que demuestra en el sabor de cada uno de sus productos.

Es en este año cuando arranca la elaboración artesanal del queso, por el momento sólo de leche cruda de oveja, comercializándose el producto a nivel local y comarcal bajo la marca 'Manzano Hernández'.
Pasan los años y la elaboración artesanal se va industrializando progresivamente. La comercialización llega a todo el territorio nacional y en 1969 la primitiva instalación artesanal se traslada a la ubicación de la Ctra. Villanueva. Además, la marca comercial pasa a ser 'Manzer' y se elige al característico ratón como símbolo.
Durante este año las instalaciones sufren una ampliación muy importante, fruto del crecimiento de la compañía. Concretamente se inaugura la nueva área de fabricación, donde, con la más novedosa tecnología, se duplica la capacidad de fabricación. Igualmente, el portfolio de productos se amplía con la incorporación de quesos de mezcla y cabra en distintas maduraciones.