
Receta para San Valentín
Publicado el 11/02/2016
Sabemos que el día de San Valentín resulta muy especial para muchas personas y muy odiado por otras. En cualquier caso, y lejos del espíritu consumista que intentan contagiarnos, es un buen día para preparar algo especial. Un día para ser detallista con la o las personas que quieres. Por supuesto uno tiene que demostrar día a día lo que siente, pero no está de más que exista un día dedicado al amor.
Así que allá vamos con nuestra receta especial para este día. Es una receta sencilla de hacer y original, diferente al resto de tartas de queso que suelen cubrirse con diferentes mermeladas. Esta tarta además, no es empalagosa y tiene un sabor dulce muy especial.
Ingredientes:
- ½ litro de nata líquida para postres.
- 1 vaso de leche, a ser posible entera o semidesnatada
- 450g. De crema de queso
- ¾ partes de azúcar en un vaso
- 1 sobre de cuajada
- 14 bizcochos de soletilla
- 20 nueces
- 60 g. de mantequilla
- Fresas
- Un licor de frutas dulce
- 1 lámina de gelatina sin sabor
Elaboración:
En primer lugar, ponemos a derretir la mantequilla en un cazo. Mientras tanto, trituramos los bizcochos de Soletilla junto con las nueces. El siguiente paso es mezclar las nueces y los bizcochitos triturados con la mantequilla y añadir la mezcla al molde en forma de corazón. Extenderla de forma que quede repartido en el molde de forma homogénea y prensada.
En un bol a parte echamos la nata con junto la leche, el queso, el azúcar y la cuajada. Batimos todo y ponemos la mezcla a fuego medio, removiendola bien con una cuchara. Debemos esperar a que esta se presente uniforme y coja cuerpo. Antes de que comience a hervir apagaremos el fuego y la dejaremos templarse. Cuando se encuentre templada añadiremos nuestra mezcla al molde en forma de corazón con el fondo de galleta. Para evitar que la mezcla despegue el fondo, la verteremos sobre una cuchara para de esa forma romper el chorro y evitar que salga con mucha fuerza. A continuación introducimos el molde con las mezclas en el frigorífico. Cuando permanezca durante unas horas en frío podemos añadirle la cobertura.
La preparación de la cobertura es bien sencilla. Ponemos en agua fría la lámina de gelatina y posteriormente la deshacemos con un poco del licor calentado que hayamos elegido. Lo cierto es que los licores con sabores de fresa, frutos rojos o frutas silvestres le va muy bien.
A continuación cortamos las fresas en láminas. La propia fresa presenta una forma de corazón al cortarla. Cuando tengamos las suficientes para cubrir el molde las colocamos encima y le añadismo el licor templado. La metemos en el frigorífico a enfriar y por último podemos añadir a cada fresa cortada una pequeña perla de decoración dulce.
Y…¡Voilá! El resultado es un postre especial, dulce y delicioso.
VOLVER A NOTICIAS